El regalo del amor

No sé por donde empezar, pero ¿qué mas da?, eso seguro que en años lo volveré a leer y será una perfecta postal de este día.
Empiezo por una breve historia:

Un monje caminaba, cuando un movimiento le hizo perder la concentración. Algo se agitaba dentro del agua; un alacrán de gran tamaño había caído en el estanque, -¡lo tengo que ayudar!-pensó para sí el monje, y sin pensarlo metió la mano y sujetó al alacrán.
Al sentirse a punto de morir el alacrán arremetió contra aquel que lo sujetaba atacándolo con su cola.
El monje soltó al animal al percibir el agudo dolor del aguijón y éste cayó al agua ahogándose nuevamente. Asustado sacó del agua una vez más al alacrán y sin esperar a tomar aire el animal volvió a atacar con su cola.
Atraído por el auch del monje un caminante se acercó a ver de cerca lo que sucedía. Antes de escuchar las sabias palabras del ermitaño de inmediato aseveró: -Qué necio eres en quererlo ayudar, cada vez que acerques tu mano, él te picará.
-Mi naturaleza está en ayudar, y eso es lo que hago. Si no lo saco del agua morirá; la naturaleza del alacrán está en picar,  tomó una hoja larga, se la acercó al animal y ayudado por sus tenazas se sujetó de ella. El monje los depositó a ambos sobre una roca seca y limpia. El alacrán de inmediato corrió hacia el sol.
 Jamás cambies tu naturaleza a pesar de que alguien no quiera ser ayudado, o seas traicionado o rechazado; simplemente hazlo con más cuidado.

Me encanta el relato, y me va a servir para  ilustrar.
Los seres humanos buscamos evadir el dolor a cualquier coste; para eso nos esfozarmos. Y muchas, pero muchas veces el amor -en su forma general- pero sobre todo el amor a otra persona es calificado como signo de 'debilidad'. Y tiene lógica si pensáis en que colocas parte de tí en alguien que no eres tú.

A través de la experiencia fui descubriendo como el principal obstáculo para entablar una relación de noviazgo, ¡o no vayamos tan lejos! el simple hecho de aceptar que estamos enamorados se ve opacado, casi impedido por las propias experiencias negativas pasadas. Y es muy triste. 

Predisponer los sentimientos a sufrir una decepción es como dijo un amigo: ' similar a decir a un niño al que regalas un cachorro, que su mascota algún día va a sufrir, y finalmente morir'. ¡Y no hay absurdo en eso!, incluso hablas con la verdad. ¿Pero es necesario decirlo? yo creo que no. El niño no tiene esa conciencia, de la muerte. La vida nos lo eneseña a medida que crecemos; a medida que maduramos.
Muy buien podéis amargar la experiencia de su mascota, si se lo dices: pues vivirá esperando a que eso ocurra. Perdonen por ejemplo, pero me pareció perfecto. 

Algo así nos pasa. Las malas experiencias nos dejan marcados, cierto; pero no debemos permitir que contaminen lo que no lo está. Cada noviazgo es distinto, aunque no tiene que ser perfecto; pero si debe ser una paso adelante en ese camino de la madurez afectiva. Yo siempre he pensado que existe un tiempo para aprender, y que luego tenemos la obligación de actuar con la madurez que nos otorgan los años; y llega un momento de nuestra vida, en que somos adultos, y que debemos de dejar esas experiencias dolorosas de la adolescencia, o las primeras de la juventud. ¡Es una nueva etapa!

Hablo de mi experiencia, me pasó enamorarme de quién no 'estaba lista' o debo decir con sus propias palabras 'que no creía en el amor'. También oí decir 'es que no sé, quizá no sirvo para esto'. Y ambas premisas son válidas, pero reflejaban eso que comentaba anteriormente.  Incluso pasar por esas etapas díficiles en que un amigo se queda con tu novia (y no se burlen), o que sencillamente 'se enamoró de alguien más', estando contigo. Y también, quien simplemente jamás notó tu existencia.  Y ahí aprendí. 

Hasta que me hice fraile logré entender que el amor, se justifica a sí mismo. Explico.
Uno cuando descubre el amor, piensa que éste debe ser correspondido para que tenga sentido. Y casi siempre nos quedamos en esa idea. Canciones de dolor, desamor, borracheras, depresiones y demás cosas. Hacemos que el amor pierda su valor más auténtico: es gratuito.
El amor no necesita ser correspondido; se puede amar así. ¡Dichosos aquellos que tienen la fortuna  de ser amados por quienes aman!, pero no siempre es así.  Esperar respuesta es como querer recibir a cambio de lo que yo doy; se convierte en comercio. Aquí enlisté once ventajas de estar enamorado. Y todas ellas perfectamente son ciertas aunque ella/él no sienta lo mismo que tú.
Amar implica hacerlo libremente, por amor. Amar es gozarse de la existencia de alguien más, disfrutar su existencia, aunque no su presencia. Amar es hacerlo sin esperar.

La naturaleza del ser humano, es ¡amar!, así es, aunque en esta dualidad también tendamos a dañar a quienes nos aman. O incluso lastimarse  y lastimar durante el camino. Porque a propóstio, o por torpeza, hemos herido; aceptar que somos responsables de una pena, nos ayudará a disculpar a quienes nos hirieron. Regla milenaria.
Pero si renunciamos a esa parte fundamental, que nos distingue, y que nos humaniza, estamos en la lona. 

Termino así:  Nunca esperé nada, soy sincero. Es más nunca tuve un 'idealismo' sobre una mujer, vaya quizá soy poco entusiasta. Aunque eso me ahorró muchos sinsabores; pero de repente, a lo lejos, y todavía vagamente veo a quién es como una flor con todos los pétalos que un admirador desea ver conjugados en un jardín. 

Y entonces, pienso de nuevo, que el amor es como lo he descrito, y que si me estoy enamorando más que desear ser correspondido, hace falta disfrutar, contemplar, admirar y suspirar eso que nuestra naturaleza nos dió: el amor.

¿el amor existe?,  ¿cóm se si me enamoré?, ¿qué es ela mor?,  errores del amor, el amor es una mentira, el noviazgo, ¿me estoy enamorando?